Llega el verano y entre nuestros imprescindibles siempre se encuentra un complemento: las gafas de sol. Sin duda, es uno de los accesorios por excelencia de la época estival y es habitual lucirlas en cualquier ocasión durante el día, ya sea en la playa, en la montaña, al dar un paseo o, como no, al conducir.
Las gafas de sol son imprescindibles en los días veraniegos para proteger nuestros ojos de los rayos UV, pero además, juegan un papel importante a la hora de complementar nuestros looks y, de la misma manera que en esta época no falta un vestido largo en tu armario, tampoco deben faltar unas gafas de calidad y que se adapten a tus gustos y estilo.
Orígen de las gafas de sol
Conocer el origen exacto de este complemento es complicado, hay quien dice que fueron ideadas por los pueblos esquimales, hace más de 12.000 años, como la única manera de proteger sus ojos del reflejo del sol en la nieve. En concreto, se cree que fueron los Inuit los que utilizaban unos anteojos fabricados en marfil con rendijas estrechas para ese fin.
Sin embargo, la primera constancia sobre las que conocemos hoy como gafas de sol procede de la antigua China. Tenemos que remontarnos al siglo XII cuando se desarrolló la tecnología para ahumar los cristales de cuarzo, logrando así oscurecerlos y con ello lograr dos objetivos: protegerlos de la luz y ocultar las expresiones faciales en los juicios para no generar ninguna opinión.
Más adelante, en torno al 1430 cuando llegaron a China las gafas graduadas desde Italia, combinaron las dos técnicas para conseguir crear las primeras lentes graduadas oscurecidas, un accesorio que usaban principalmente los jueces en aquella época.
En el siglo XVIII sería James Ayscough, un conocido óptico británico, el que comenzó a realizar experimentos con lentes tintadas pero más que para proteger los ojos del sol, lo hacía como remedio a algunos problemas específicos de visión.
Finalmente, sería en el siglo XX cuando llegó una auténtica revolución para este complemento, tanto en su diseño como en la funcionalidad. El cine y Hollywood convirtieron las gafas de sol en un símbolo de glamour de la mano de auténticas estrellas como James Dean o Audrey Hepburn. Además, en 1936, Edwin H. Land inventó los cristales polarizados lo que supuso una importante mejora en la visibilidad y en la protección contra los reflejos.
A lo largo de este siglo las gafas se han integrado totalmente en la moda y los diseñadores crean propuestas que no solo protegen contra los rayos UV, sino que son un complemento más del look convirtiéndose en un accesorio imprescindible en el día a día.
La importancia de las gafas de sol para proteger los ojos
Más allá de ser solo un accesorio de moda, las gafas de sol protegen los ojos frente a la radiación ultravioleta, un hecho muy importante ya que un 20% de los casos de ceguera están relacionados con la exposición solar. Por ello, además de ser un accesorio de moda, debemos priorizar que sean unas gafas de calidad.
En Magar Shop le damos mucha importancia a este aspecto y las gafas que encontrarás en nuestra shop online cuentan con unas lentes de protección UV 400, es decir, que protegen los ojos entre un 99% y un 100% de los rayos UVA y UVB, lo que ofrece una visión de calidad y una protección totalmente segura.
Durante los días de sol y desde pequeños, se debe prestar mucha atención a proteger los ojos. Las gafas deben ser un accesorio imprescindible que, no sólo hará que tus ojos estén seguros, sino que podrás darle un toque diferente a tus outfits.